Zapater, ejemplo a seguir

En Aragón nunca valoramos lo nuestro lo suficiente. Tener a jugadores maños de la calidad humana y deportiva de Alberto Zapater, debería de producirnos una alegría tal, que deberíamos de llegar a quererlos como a hijos ó hermanos. Lo que pasa es que aquí, como a tantos y tantos artistas ó deportistas de élite, le negamos el pan a los nuestros para darles langostinos a los de fuera que valen mucho menos. Si tomásemos buena nota de comunidades autónomas donde todo lo de ellos lo valoran y lo hacen valer al exterior como si fuese oro molido (aunque realmente sea mucho peor que lo nuestro), en vez de tener envidias y poner zancadillas a lo nuestro, seguro que saldrían muchos más jugadores, artistas y personas cotizadas de nuestro querido Aragón. Zapater es un ejemplo a seguir por su comportamiento en el terreno de juego, donde se deja todo por su equipo de toda la vida, como por sus manifestaciones a los medios de comunicación. Es el hombre que en los momentos malos siempre atiende a la prensa, y dando un ejemplo de sinceridad increíble, dice bien claro los errores que están cometiendo, los primeros los de él mismo. Sus contestaciones a preguntas inoportunas cuando no juega, siempre son moderadas y con un respeto hacia el entrenador y hacia sus compañeros exquisito. Lo gracioso, es que cuando ves a gente de la prensa, que se las da de ser amigos suyos, que colocan varias alineaciones posibles y que nunca ponen a Zapater como titular, te da mucho que pensar, y te produce unas naúseas terribles. Espero que nunca cambie Zapater, porque es la bandera de Aragón que mejor puede ondear por los terrenos de fútbol españoles. Aúpa Zapater y abajo los hipócritas y aprovechados.